GREGORIA CANELO DE PAREDES, 1861-1917*
Pionera en la difusión del dialecto chinato
Entre las personas que han contribuido a dar proyección al concepto “chinato” como dialecto y gentilicio del pueblo de Malpartida de Plasencia (Cáceres), destaca con luz propia Gregoria Canelo de Paredes; “doña Gregoria” en los abundantes documentos relacionados con la dialectología y la historia de la lengua española donde aparece su nombre encabezando las aportaciones hechas por nuestra ilustre paisana, sobre todo, a don Ramón Menéndez Pidal a principios del siglo pasado. Ambos mantuvieron una fructífera correspondencia, génesis de un conocimiento amplio del dialecto chinato, basado en información directa y fehaciente, plasmado en libros del gran polígrafo ligado al noventayochismo y difundido y sistematizado por su nieto, Diego Catalán, en un trabajo fundamental para el conocimiento de la antigua habla local de una comunidad rural del norte de Extremadura. ("Concepto lingüístico del dialecto ‘chinato’ en una chinato-hablante", Revista de Dialectología y Tradiciones Populares, X, 1954). Bien está, pues, que, al socaire de los actos de homenaje a la mujer en su día internacional, el cronista y paisano suyo, actualice la figura y destaque la importancia de Gregoria Canelo de Paredes, de soltera: Gregoria Canelo Jiménez.
Se une, además, a tal motivación
un impulso foráneo, una iniciativa de esas que nos evidencian cómo en algunas
ocasiones son otros los que valoran con justeza lo nuestro, en tanto que, por
cercano y familiar, nosotros no le concedemos la debida atención. Es el caso. Hace
un par de meses, la profesora Mentxu Ramilo Araujo, desde el País Vasco, contactó
conmigo recabando datos precisos referidos a las fechas vitales (nacimiento y
muerte) de Gregoria Canelo. Los ha incorporado de inmediato a la página creada
por ella en la Wikipedia con el nombre de nuestra paisana; lo cual, por un
lado, nos llena de satisfacción y, por otro, nos provoca una cierta vergüenza,
pues esa tarea honrosa y divulgadora debería haber sido de nuestra competencia
hace tiempo. Admitida la falta, bienvenida sea la presencia de esta mujer
chinata en el candelero de la excelencia y en medios de difusión de tanto
alcance como la Wikipedia, en el que figura ya Gregoria Canelo de Paredes
gracias a la doctora Ramilo y a su tarea de divulgación de los méritos,
capacidades y aportaciones de las mujeres singulares en muy diversos ámbitos.
Josefa Gregoria Canelo Jiménez, según registra el cura párroco Valentín Eustaquio Durán, hija de Silvestre Canelo y de María Matilde Jiménez, nació el 19 de marzo de 1861 y fue bautizada el día 21 en Malpartida de Plasencia. Sin duda, Gregoria debió de aprender las primeras letras en la escuela privada de niñas que ya había entonces en el pueblo, pues la sufragada con fondos públicos era la de los niños, tal como certifica y describe Pascual Madoz a su paso por Malpartida a mediados del siglo XIX. Como hija de familia de labradores, sabía de las faenas del campo, por vivirlas de cerca y en las cuales participaría, sobre todo en los veranos cuando la recolección de los cereales, en las eras, y antes, espigando tras los segadores, asistiéndolos con agua y comida, sembrar y cavar garbanzos, y otras tareas, según ella misma cuenta por carta (19 abril 1903). Testimonios de ello se encuentran en comentarios escritos al respecto en los envíos de elementos dialectales y romances y cantares de la tradición oral a Menéndez Pidal y a su esposa, María Goyri. Pero cuando se establece la relación entre esta “mujer de extraordinario ingenio natural y creatividad (por más que se supiera "poco instruida en escritura, ni en nada") y el matrimonio de expertos filólogos, Gregoria es ya una mujer que al suyo une el apellido del marido, Paredes.
Josefa Gregoria Canelo Jiménez
y Marcial Paredes Guillén contrajeron matrimonio el 29 de julio de 1882, siendo
el oficiante el mismo párroco que había bautizado veintiún años antes a la novia.
El novio, Marcial Paredes, nacido en el cercano pueblo de Valdeobispo, fungía
ya de farmacéutico de Malpartida, ocupando la plaza creada un año antes (en
sesión de pleno de 24 de julio 1881, y Donato Pereira como alcalde), con una
asignación anual de 625 pesetas por trimestres vencidos. Tenemos constancia de
que, unos meses antes de su boda, Paredes Guillén recibía un abono de 16,50
pesetas del Ayuntamiento, en concepto de un preparado para eliminar a los
perros sueltos (cimarrones), que, por no llevar bozal (como era preceptivo) y
con hidrofobia, suponían un riesgo para los vecinos. El caso es que el
matrimonio Paredes-Canelo se estableció en la parte alta de la plaza Mayor, en
el rincón, donde estaba también la farmacia o botica, que después regentaría su
hijo Diego Paredes, y que continuaría siendo el hogar de la familia. Allí viviría
luego Valentín Paredes Mirón, nieto de Gregoria y Marcial, y que desde 1959 a
1975 llevó la vara de alcalde de los chinatos.
La relación epistolar de
Gregoria Canelo de Paredes con don Ramón Menéndez Pidal comenzó cuando este
sabio investigador y polígrafo, cabeza de una saga-escuela de eminentes
profesores y especialistas en los estudios históricos, se afanaba, con la
eficiente colaboración de su mujer, María Goyri, en la compilación de romances
y otras creaciones de la tradición por distintos territorios españoles. Aquel
intercambio de misivas entre la esposa del farmacéutico de Malpartida de
Plasencia y el prestigioso catedrático universitario fue el origen de la mayor
proyección y del conocimiento más fidedigno del habla local: el dialecto
chinato. Menéndez Pidal encontró en Gregoria Canelo la hablante que se
expresaba con fluidez en la lengua común y, al mismo tiempo, sabía distinguir
sin problemas los rasgos diferenciadores del dialecto local y hablarlo con sus
paisanos, por lo que Pidal y su nieto (Diego Catalán) la consideran hablante
bilingüe y “certera informante sobre la llamativa manera de expresarse los
chinatos”. Destacaban también, en ese aspecto, el buen oído de “doña Gregoria”
y la facultad para reproducir por escrito aquella habla. Pero la esposa del
farmacéutico Marcial Paredes, además, “resultó ser una notable colectora e
informante del Romancero local”, que le proporcionó al matrimonio M. Pidal-Goyri
un buen número de romances y canciones, recogidos por ella de la tradición oral
entre las gentes del pueblo.
En efecto, a los cuatro manuscritos
de Gregoria Canelo, “en los que reproduce el habla de Malpartida de Plasencia
[…], y que sirven de base a Catalán”
para el análisis de las peculiaridades
fonológicas del chinato, han de añadirse cerca de treinta versiones de
romances, acompañados de certeros comentarios, no solo de cómo los conocía
("todas ellas las aprendí yo con canción o tonillo cuando tenía catorce o
quince años”), sino también acerca de las circunstancias de sociabilidad en los
trabajos de los labradores: horarios de las faenas, horas de descanso y de
comidas, las siestas, las merendillas, etc.; y cómo, en tanto que los varones
echaban una bola para fumar un cigarro, las mujeres cantaban o contaban
romances, canciones antiguas, acertijos, cuentos, chascarrillos.
Así, pues, los materiales
informativos proporcionados por Gregoria Canelo de Paredes a Ramón Menéndez
Pidal fueron estudiados con rigor y publicados en obras muy significativas y
prestigiosas de historia de la lengua, la dialectología y la tradición popular.
En ellas, tanto el nombre de Malpartida de Plasencia, como el dialecto y
gentilicio del lugar – chinato --, alcanzaron proyección internacional
en los ámbitos de la filología, la dialectología y la etnografía, entre otros.
Tan relevante aportación se la debemos los chinatos a una paisana de origen
humilde, pero inquieta, clarividente y observadora, que, a pesar de carecer de
estudios y con la sola instrucción primaria, supo reconocer aspectos esenciales
de la idiosincrasia de su pueblo. Esta mujer singular, signada por una elevada
inteligencia natural, nació, vivió y murió como Josefa Gregoria Canelo Jiménez.
Ha pasado a la historia como Gregoria Canelo de Paredes. Por todo ello, hoy honramos
su memoria e intentamos preservarla del olvido entre los suyos en sencillo
homenaje con motivo del Día Internacional de la Mujer.
Malpartida
de Plasencia, marzo de 2023
(*) Enviado a Aires Chinatos para su publicación en el número correspondiente al trimestre enero-marzo de 2023. Por parte de la prensa regional impresa (El Periódico Extremadura y Hoy), una versión adaptada y más reducida no ha merecido publicarse. Ya es habitual el asunto, dada la excelente calidad de todas las colaboraciones, tribunas, artículos, etc. que publican dichos medios. La revista Grada, sin embargo, sí lo ha hecho, y copio el enlace. con la expresión de mi gratitud hacia el equipo de dirección/redacción. (Soy deudor de algunas anotaciones , que entrecomillo, de Diego Catalán, El Archivo del Romancero , en la edición PDF que podemos consultar en la red, y de José Antonio González Salgado, Blog http://geolectos. blogspot.com/Geolectos y otras realidades lingüísticas).
https://es.wikipedia.org/wiki/Gregoria_Canelo_de_Paredes
https://www.grada.es/gregoria-canelo-de-paredes-pionera-en-la-difusion-del-dialecto-chinato/cultura/mas-cultura/